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Civilización o Barbarie
Fecha de Publicación: 25-10-2025
Por Francisco Ramos-FSN-CABA
Con motivo de un nuevo 12 de octubre seguimos reflexionando en relación a un pensamiento nacional americano y descolonizado, que tanta falta nos hace para asumir una conciencia Soberana.
Los pueblos ancestrales se diferenciaban por su característica nómada y conquistadora, o un sedentarismo relacionado al trabajo agrícola en un territorio establecido.
Los primeros, cazadores, expansionistas y depredadores de otros pueblos, los segundos más pacíficos, defensores del territorio y su comunidad.
La dominación y avaricia de los pueblos guerreros, fue forjando un pensamiento supremacísta construido tras muchas generaciones de conquistas, mientras otras culturas desarrollaron técnicas de defensa ante los continuos ataques sufridos. El corte de la famosa ruta de la seda por la caída de Constantinopla, provocó la interrupción del ingreso de productos desde Oriente, necesarios para los reinados occidentales y su exagerado nivel de vida. En busca de otra ruta que los comunicara con India y China, verdaderos centros de desarrollo y producción mundial, se lanzan las expediciones marítimas hacia el Atlántico, de un tal Cristofolo Colón y su europea visión del descubrimiento y conquista de un "nuevo" continente que siempre estuvo allí. Lo que siguió fue lo mismo que hacian aquellos pueblos nómadas guerreros que tenían marcado en su ADN la explotación de otros pueblos y la naturaleza como único medio de enriquecimiento sin tener que trabajar, por eso hablamos de una clase parasitaria e improductiva. Los nativos de estas tierras fueron tratados como animales de carga y de trabajo, por aquellos embajadores reales de su Majestad, y a quienes se resistian simplemente los exterminaban, el "indio bueno" era el explotado o muerto, cárcel o bala, diría el narco candidato libertario que no fue...
Ese 12 de octubre comienza la heroica resistencia nativa a la salvaje depredación de las elites europeas, principalmente inglesa en el norte, e ibérica en el centro-sur del continente.
Pero ese afán(o) de dominación y expansionismo se extendió también por otras latitudes africanas y asiáticas, por parte de las monarquias británicas y holandesas, y las hipócritas burguesías francesas, que proclamaban igualdad hacia adentro (y tampoco tanto) y colonialismo extractivista hacia afuera. Colonialismo basado sobre ese sentido-sentido de superioridad, la civilización eurocéntrica por sobre la barbarie periférica, invirtiendo la carga de la prueba, sin asumir su propia Barbarie sobre otras Civilizaciones.
Invertir esa lógica y mirar la historia con cabeza propia americana es la práctica decolonial que debemos implementar a cada paso de este pensamiento Soberano en construcción, donde no hay lugar para los hegemonismos forzados, violentos ni tecnoimpuestos.